HOTEL RUANDA

DIRECCIÓN: Terry George
TÍTULO ORIGINAL: Hotel Rwanda (2004)
PAÍS: Reino Unido, Sudáfrica, Estados Unidos, Italia
GUION: Keir Pearson, Terry George
FOTOGRAFÍA: Robert Fraisse
MÚSICA: Andrea Guerra, Rupert Gregson-Williams y Afro Celt Sound System
DURACIÓN: 121 minutos

 
 
 
 
   
 
 

Juan Carlos Romero Puga | @jcromero

Hotel Ruanda es el primer largometraje comercial en ocuparse del genocidio registrado en Ruanda en 1994, una matanza tan rápida y cruel (casi un millón de personas asesinadas en 100 días) de la que pocos, muy pocos conocen, vista a través de los ojos de Paul Rusesabagina, gerente del Mille Collines, un hotel de cuatro estrellas en Kigali, quien salvó de la masacre a más de mil 200 ruandeses, convirtiendo el negocio a su cargo en un campo de refugiados.

Ruanda fue colonia alemana hasta 1918, pero Bélgica se hizo cargo de su administración después de la Segunda Guerra Mundial, entregando la jefatura a la etnia tutsi, que controlaba casi por completo a los campesinos hutus. Sin embargo, fue la forma en que actores locales e internacionales manipularon las identidades comunitarias lo que desataría la violencia étnica, un golpe de Estado perpetrado por hutus en 1961 y el éxodo masivo de tutsis que terminó en el baño de sangre de los noventa.

La historia de Hotel Ruanda se inicia justamente en abril de 1994, luego de la muerte del presidente Juvenal Habyarimana en un misterioso accidente aéreo, hecho que fue utilizado por los extremistas hutus como excusa para iniciar el genocidio contra la población tutsi y los hutus moderados.

La hombrada de Paul Rusesabagina (Don Cheadle), sin embargo, no está planteada como un acto heroico en sí mismo. Este gerente de hotel es llevado a actuar por las circunstancias, dado que su esposa, sus hijos y sus familiares más cercanos —vistos como "cucarachas" por los comandos asesinos— pertenecen a la etnia tutsi.

Si bien, la crudeza del exterminio en Ruanda tiene apenas paralelo con el Holocausto judío, Rusesabagina no es de ninguna forma Oskar Schindler, como muchos han sugerido. En todo momento, la historia del ruandés no pierde dhote vista que lo primero que está en juego es su vida y la de su familia, lo cual no obsta para que su actuación sea considerada una hazaña.

Si el director Terry George logra mostrar escenas verdaderamente desoladoras, esto no es gratuito, ya que el realizador es originario de Irlanda del Norte, país sumido en una histórica guerra de odio entre católicos y protestantes. Como valor agregado está también la colaboración de Paul Rusesabagina, quien supervisó varios detalles del filme.

Asimismo, si algo hay que destacar sobremanera de Hotel Ruanda son las actuaciones de Don Cheadle y Sophie Okonedo en el papel de su esposa Tatiana. Cheadle protagoniza a un hombre rebasado por sus obligaciones ya no digamos familiares y comunitarias, sino aun por las profesionales. Paul, su personaje, se propone —y así lo cumple— mantener la dignidad y el mando del hotel que le ha sido encomendado, hasta el último día en que éste se mantiene en pie.

No es un hombre que se cuestione sobre su responsabilidad histórica ni se lacera por la posibilidad de haber salvado a más ruandeses del genocidio; usa sus contactos lo mejor que puede y se impone con inteligencia y diplomacia en medio de un montón de bárbaros y de ignorantes.

Aunque Hotel Ruanda llega a México casi nueve meses después de su estreno, incluso cuando ya es posible verla en DVD, vale mucho la pena acudir a las salas de cine; estamos ante una de las mejores cintas de 2004.
 

CANAL RSS
YOUTUBE
CONTÁCTANOS


DISTRITO CINE. Los contenidos de este sitio están sujetos a una licencia Creative Commons 2.5, con excepción del material (fotos, imágenes, videos) procedente de terceros.